Qué es la Terapia Ocupacional

“La medicina te salva la vida y la terapia ocupacional te enseña a vivirla.”


La Terapia ocupacional (TO) es una profesión socio-sanitaria regulada por Ley (LOPS 44/2003 de 21 de noviembre)

Su finalidad consiste en potenciar al máximo las capacidades funcionales y lograr el máximo rendimiento en las actividades de la vida diaria, cuando se producen interrupciones en las rutinas y en las capacidades físicas, cognitivas y sociales.

Trata de que todas las personas se encuentren integradas en la sociedad viviendo con sus limitaciones, pero con el mayor grado de independencia posible.

En el caso concreto de los niños, es una disciplina que ofrece la posibilidad de adquirir habilidades para poder hacer frente a sus actividades de la vida diaria; jugar, aprender en el cole, asearse, vestirse, hacer deporte… y potenciar su desarrollo y bienestar. Una estimulación temprana les ayuda al crecimiento óptimo, jugar y mejorar su rendimiento escolar, estimular etapas del desarrollo como fortalecer tronco, extremidades superiores e inferiores, desarrollando coordinación, memoria… Trabajando su independencia en las Actividades de la Vida Diaria (vestirse, bañarse, cepillarse los dientes…), se les ayuda a desarrollar distintas destrezas:

  • Motoras finas (abrocharse los cordones, mejorar la escritura, cortar con tijeras…)
  • Motoras gruesas (correr, saltar a la comba, realizar pases con balones…),
  • Cognitivas (concentración y atención, memoria, multitarea…)
  • Sensoriales-perceptivas (aceptación de diferentes texturas de alimentos, tacto y contacto físico…)
  • Comunicativas y sociales (resolver conflictos, expresar sentimientos…)

 

La terapia ocupacional asistida con animales, más concretamente con perros, es un método terapéutico complementario a los tratamientos convencionales. La participación del perro como agente de cambio y canalización facilita la relación terapéutica. No se trata simplemente de acariciar al animal (aunque en algunas sesiones puede ser útil), sino de plantearse objetivos y actividades en las que intervienen las destrezas en las que el paciente encuentra limitaciones. Por ejemplo: fomentar la memoria con la práctica de habilidades caninas, aprender habilidades sociales y comunicativas empatizando con los sentimientos del perro en diferentes situaciones, dinamizar las actividades para disminuir el tono muscular con contacto físico, etc.